Es irracional y,
entonces, no tiene corazón. No es humana y, ni siquiera, animal. Es muerte para
la vida. Infelicidad: ¡No vale la pena!
Testimonio 1
Salvador, tú sabes bien que la guerra es un juego muy
cruelentre los que se sienten poderosos en este mundo. Los que sufren son gente
sencilla y pobre.
Varias veces, también en Colombia, tuve momentos en
los que vi la locura de este mundo. Y realmente, si no tuviera la poca fe que
tengo, sería mucho más difícil vivir estas realidades.
Muchos tratan de entender lo que está pasando ahora en
Ucrania. Yo no. No pierdo tiempo ni desgasto mi cerebro, ni mi espíritu en
tratar de comprender lo que está pasando.
Creo que la característica principal de la locura es
la falta de lógica. Entonces ¿para qué tratar de comprender algo que carece de
lógica?
Aquí en la casa tenemos varios refugiados. Sobre todo,
son mujeres con niños de variada edad. Algunos vienen por unos días y luego
viajan más allá... Otros se quedan, no sabemos hasta cuándo.
¡Bendito Dios que podemos recibirlos! ¿Sabes? Entre
tantos absurdos, hace pocos días empezó la primavera. Y las primeras flores ya
alegran nuestro jardín.
Tomek Basinski, misionero Comboniano, en Polonia, su
tierra
Testimonio 2
Todos estamos preocupados y disgustados por una guerra
absurda, cuyas razones son incomprensibles e injustificables.
Lo que emerge y preocupa es el gran sufrimiento
causado, sobre todo a personas inocentes, ancianos, mujeres, niños. La
situación en general, como bien la describen todos los medios de comunicación,
es la de un aumento diario, constante y continuo de refugiados, especialmente,
aquí en Polonia. Es destacable el esfuerzo de acogida que se está organizando.
Nosotros ayudamos, como misioneros de la Consolata
presentes en Polonia desde hace 13 años. Actualmente somos seis misioneros de 5
países diferentes.
En este momento, difícil y desafiante, nuestro compromiso
con los refugiados lo desarrollamos en tres direcciones:
• Acogida de refugiados
• Recolección de bienes (alimentos, bebidas, ropa,
medicinas...)
• Recolección de ofrendas económicas
Nuestra comunidad de Kiełpin trabaja en estrecha
colaboración con la parroquia de Sta. Margarita. Aquí el número de refugiados alojados supera
los 1500 y crece cada día. Esto se explica por el hecho que estamos a pocos
kilómetros de la capital, Varsovia, donde se encuentran las embajadas de todos
los países. De hecho, muchos refugiados intentan llegar hasta sus familias,
incluso fuera de Europa. Para ello necesitan documentos y permisos.
Los refugiados son principalmente ucranianos, mujeres
y niños. En nuestra casa de Kiełpin recibimos a Pietro, un padre ucraniano con
su hija Anastasia, de 9 años. Huyeron de la región de Donbas de acuerdo con su
esposa, que no pudo salir debido a la invalidez de su madre, quien está en
silla de ruedas. Les gustaría unirse a un miembro de la familia en Estados
Unidos.
Nuestros vecinos, Raffaele y Giulia, recién casados,
acogen en casa a una joven pareja nigeriana con un recién nacido, de tan solo 4
meses. Huyeron de Kiev, donde estudiaban en la universidad. Estos son pequeños
ejemplos de historias, ordinarias en estos días.
Agradecemos y acompañamos a quienes ya están trabajando
para aliviar tanto sufrimiento causado por la guerra en Ucrania, especialmente a
nuestros amigos y cohermanos in Italia y Portugal. Varias de nuestras
comunidades se han disponibilizado para recibir las ayudas.
Ashenafi Yonas Abebe, misionero de la Consolata, de
Etiopia, en Polonia
En Colombia se está viviendo un proceso electoral, con el fin de elegir un nuevo Congreso nacional, conformado por el Senado y la Cámara de representantes y un nuevo Presidente de la república.
Como ciudadano, celebrando la Eucaristía, en el Ancianato de Fontibón – Bogotá, después de haber ejercido mi derecho-deber ciudadano de votar y de asistir a varios debates políticos en este proceso electoral colombiano, me ha venido está intuición que coloco a su interpretación.
Objetivo: “Yo he venido para que todos tengan vida y la tengan en plenitud” (Juan 10,10)
Programa: “El Espíritu del Señor está sobre mí. Él me ha ungido para llevar buenas noticias a los pobres, para anunciar la libertad a los cautivos y a los ciegos que pronto van a ver, para poner en libertad a los oprimidos y proclamar el año de gracia del Señor” (Lucas 4, 14-21)
Imagen: un banquete (cfr. Isaías 25, 6-10), que manifiesta el Reino de Dios con una gran comida en la casa del Padre, en torno a una única mesa, donde las personas y la creación aparecen reconciliadas y alegres (Mateo 22, 1-14).
Pilares de la mesa
Poder – política, sin favorecimientos: el que quiera ser el primero, que se haga servidor de todos (Mateo 20, 20-28).
Pan – economía, sin acaparamientos: producto de la “casa común” y del trabajo humano para ser cultivado, procesado, partido, repartido, compartido y reciclado (Lucas 9, 10-17).
Pacto – acuerdo, entre todos, a favor de los caídos en el camino y los samaritanos: para la fraternidad universal (Lucas 10, 25-37).
Proceso: Conversión, cambio de ruta, “el Reino de Dios está en medio de Ustedes” (Lucas 17, 20-21). “Otro mundo es posible”, como lo afirmamos y proponemos en la Animación Misionera Juvenil y Vocacional de los Misioneros de la Consolata, en Colombia.
El pasado 27 de Febrero del 2022, celebramos en la Parroquia Madre de las Misiones, Modelia – Bogotá, una solemne, emocionante y significativa Liturgia Eucarística, presidida por el Superior de los Misioneros de la Consolata en la Región Colombia, acompañada por varios misioneros, familiares, amigos de Pacho y muchos fieles de la comunidad parroquial.
CAMINOS RECORRIDOS
Como todo ser humano, Pacho en sus 29 años ha recorrido un camino, con varios trechos o etapas, que lo ha traído a este presente festivo y proyectivo. Re-pasemos (pasemos por la memoria racional) o re-cordemos (pasemos por la memoria del corazón) algunos instantes, pasos o acontecimientos que fueron sumando, en el pasado, para construir este presente:
LA FAMILIA
Un encuentro fecundo y fiel, en Bogotá, entre Francisco, de Lloró – Chocó y Blanca Marina, de Villa Pinzón – Cundinamarca. Cinco hijos, cuatro hermanas y Edwin (25/06/1993), número interesante para conformar un hogar con afecto, fe, dirección, casa y pan.
EL COLEGIO
Otro encuentro, esta vez en la escuela y el colegio (Francisco Javier Matiz), fue sembrando inquietudes y generando búsquedas intelectuales, de pronto orientadas por la ingeniería electrónica o por la psicología, de alguna manera entre las ciencias técnicas y las sociales, mezcladas con el deporte, la aventura y los amigos.
LAS ESPERE
Fue allí, en el Colegio, donde un día llegaron las ESPERE (2007), Escuelas de Perdón y Reconciliación, gestadas, inspiradas y acompañadas por el P. Leonel Narváez, Misionero de la Consolata, sociólogo y teólogo de formación, con amplia experiencia de solidaridad entre los pobres del Norte del Kenia – África y del Caquetá – Putumayo, en Colombia. Las ideas del cuidado, la empatía, la justicia restaurativa, el perdón y la reconciliación, entre otras, encajaron en la mente y el corazón del joven con raíces Afro. Ahí encontramos al adolescente Pacho participando de campamentos formativos y encuentros de perdón y reconciliación, con muchos otros jóvenes, a nivel país.
LA CENTRAL DE JUVENTUDES – CEDEJ
Coincidencias (casualidades) o “diosidencias” (providencias divinas), las ESPERE le mostraron la Central de Juventudes a Pacho y allá lo encontramos, en la Capilla, Cachipay – Cundinamarca, con su entusiasmo, simpatía y peinado afro, enrolado en la Escuela de liderazgo masculina ELIM 217, en el 2009 y como “Misionero de la Juventud”, con otros compañeros, en Ibagué – Tolima, participando de la Pastoral Juvenil arquidiocesana (2010), anunciando, implementando y animando la “Misión continental”, lanzada al final de la Quinta Conferencia General del Episcopado de Latinoamérica y el Caribe (13 – 31 de mayo de 2007), en el Santuario de Nuestra Señora Aparecida (160 km de la ciudad de São Paulo – Brasil).
La Misión Continental, como tiempo de gracia para la Iglesia peregrina en América Latina y el Caribe, es una ocasión extraordinaria para que los fieles tomemos conciencia de nuestra fundamental vocación cristiana, como discípulos del Señor Jesús, llamados a estar con EL e ir, como misioneros, enviados por la Iglesia, más allá de nosotros mismos, nuestras familias, parroquias, barrios, ciudades y países, inclusive más allá de nuestras Iglesias, religiones, culturas y espiritualidades, al mundo entero, para Anunciar y Testimoniar el Evangelio a toda la “comunidad de la vida” y contribuir en la implementación de ese Reino de Dios que anunció Jesús con su vida y acción, que no es otro que el reinado del amor y la fraternidad universal.
OTRO MUNDO POSIBLE
Mientras los caminos los pueden recorrer todos los seres vivos, los sentidos los puede descubrir y perseguir, únicamente los seres humanos. Sí, descubrir (des-cu-brir) y perseguir (per-se-guir). Dos verbos que, leídos y entendidos desde sus raíces etimológicas latinas, discooperire (con su doble prefijo dis y co – operire, nos habla de “destapar algo que antes se había tapado o había permanecido oculto y hacerlo co, con otros, en compañía o cooperación) y persequi (compuesto del prefijo per,por completo y a favor de … y sequi, intentar alcanzar, seguir ininterrumpidamente, nos permiten entender mejor el “envío misionero de Francisco Martínez López”, simplemente Pacho.
En Ibagué, por esas sincronías que, desde la fe, las podemos identificar como divinas, voluntad de Dios, se encuentran El P. Alonso Álvarez Quintero (+ 2019), misionero de la Consolata reintegrado a Colombia después de más de 25 años afuera, estudiando y trabajando entre Italia y la República Democrática del Congo, y el joven Pacho. Sueños y búsquedas se mezclan e intercambian. Los ideales de “Otro mundo posible”, afirmados en los Foros Sociales, iniciados en Puerto Alegre – Brasil, frente al intento del “pensamiento único”, del “Consenso de Washington” y del “fin de la Historia” que solo veían la vía capitalista neoliberal, llamaban la atención de los dos y otros jóvenes más.
Así fueron viajando, como discípulos misioneros del Señor Jesús, caminando, navegando y volando por el país, de ciudad en ciudad, de pueblo en pueblo, de vereda en vereda, de escuela a colegio y universidad, con el Portafolio de un Proyecto Pedagógico denominado, precisamente, “Otro Mundo Posible” (Reino de Dios), implementado, presencial y virtualmente, por “Equipos de vida y misión”, a través de procesos de animación, formación y consolación-liberación, por medio de escuelas de liderazgo juvenil, convivencias, retiros, campamentos, experiencias misioneras, congresos de consolación y solidaridad con los excluidos o habitantes de calle, diplomado sobre el arte de escuchar. Todo con una metodología alter mundialista y una espiritualidad cristiana, misionera y de consolación – liberación. Guiados por el Paráclito (el Otro Consolador) y de la mano de María Consolata y el Bienaventurado José Allamano. Siempre en sintonía y con el apoyo de los Misioneros de la Consolata.
ENVÍO MISIONERO
Este es el fin de un largo proceso que, en el caso de Pacho, hoy Psicólogo de profesión, de la Fundación Universitaria Konrad Lorenz (2012 – 2017), especialista en Voluntariado Social por la Universidad de la Salle (2021) y Comunicador – Diagramador al servicio de la misión, culmina con la consignación del Crucifijo misionero, por parte del P. Armando Olaya, en el templo de la Parroquia Madre de las Misiones y dentro de una Eucaristía.
Como Laico Misionero, Pacho ha presentado al Instituto Misiones Consolata su voluntad y disponibilidad, por tiempo indefinido, para la misión con el Instituto. Aceptada su propuesta-petición en el Consejo general, han elaborado un “Acuerdo de Agregación entre el Instituto Misiones Consolata y el Laico Edwin Francisco Martínez López”, firmado por Edwin Francisco, el P. Stefano Camerlengo, Superior General del Instituto, y el P. Pedro José da Silva Louro, Secretario General. Dicho Acuerdo viene acompañado de un Proyecto de implementación de la misión para Pacho, firmado por el P. Stefano Camerlengo, Superior General, el P. Padre Godfrey Portphal Alois Msumange, Consejero General para el Continente África, Padre Armando Antonio Olaya Rodríguez Superior Regional Colombia y Padre Peter Munguti Makau Superior Regional Kenia, que incluye formación en el Carisma Misionero de la Consolata y aprendizaje del Italiano, en Italia y una primera aproximación a la misión y el aprendizaje del Inglés, en Nairobi – Kenia, antes de cualquier destinación a un lugar o actividad específica de misión.